lunes, 25 de mayo de 2009

VIAJANDO A LO CRITICÓN

Pues sí, llegamos a nuestro destino deseado incluso en menos tiempo de lo esperado. Y dejamos demostrada la diferencia de quien se traslada y de quien viaja. Pues hay quien recorre enlatado 431,2 km en 5:12 horas cambiando de emisora de radio cada cartel de provincia o quien ha de soportar al típico que ronca por todxs a su lado, mientras elige entre kiss fm o la película más mala de la historia; y existe al contrario, como no, quien recorre cien leguas en varias jornadas, cargadas todas ellas de cientos de aventuras, de miles de olores y colores por descubrir, que no se escapa a su vista ni asombro ni un arroyo, ni un bosquejo, ni un ave de paso. Nada escapa al viajero que tan sólo dispone de su tiempo, de su fuerza y de su libertad.

Y aquí, en la Cibeles, rodeadxs de bicicletas conocidas o extrañas, de cientos de sonrisas por distintas causas, repasamos de nuevo el mágico viaje que hasta aquí nos trajo.

Recordamos la accidentada salida de nuestro taller, que resultó ser más larga de lo esperado, y lo lejano que ya queda, cuando apenas a pasado una semana. Y la improvisada masa crítica granadina creada una mañana lectiva. Pronto, cuando los huertos y las riberas nos hacían ya olvidar la empedrada ciudad de Granada, llegaron las caras de circunstancia al sufrir las primeras cuestas y algún listillo las bautizaba con falsos llanos. Y el primer arroz entre los últimos olivares de Granada, y el fuego y el buen llantar que serían la tónica de nuestro trayecto.

Sorprendente se mostró la provincia de Jaén. Montañosa, verde y fresca; dura. De pueblo blanco a pueblo blanco y sierra porque me toca. Así subimos y bajamos Jaén. Las sierras del sur con sus rebaños de cabras como atasco singular, y las mejores fuentes de agua de la comarca, que todo pueblo la tenía, donde cristo perdió las chanclas. Pero vaya puesta de sol… Y ocupando celebramos el cumpleaños de Alexis. Fue una noche especial, no como la siguiente. ¿Recordáis?

Cruzamos la temida Pandera y una rampa en Jabalcuz donde fue tolerable poner el pie en el firme, evitamos el castillo de Jaén, pero ya el viento de los rompepiernas hacia Andújar rompió el ritmo. Resultó que allí nos esperaban muchos obstáculos a batir: aparte del fuerte viento, estaba la casposa inconveniencia de la profunda y rancia “religiosidad” andaluza de alcohol y fiesta en nombre de la segunda romería más grande de no quiero saber donde, encontrándonos todo establecimiento de comestibles cerrado, y hasta el albergue estaba chapado. Sin embargo, como buen grupo con recursos especializado en la supervivencia, encontramos un gran centro comercial abierto, no sabemos si por servicio a la población devota, o por su interesada laicidad. Y ya bien entrada la noche, siguiendo las indicaciones de las autoridades y a oscuras penas, no sólo conseguimos encontrar el dichoso albergue, sino que además entramos a pesar de que no hubiese quien nos abriera. Pero cuando todo estaba inspeccionado e íbamos a prepararnos para elegir habitación y preparar una buena fogata en el salón, apareció quien tenía las llaves de la puerta… Y de la mano de otras autoridades quisieron abrirla para que saliéramos, sin denuncia ni filiación, pero dejándonos en la calle. Menos mal, que la bonita sargento de mirada desconfiada, nos guió hasta un hospicio del cual nadie nos había hablado. Normal. Era aquel nuevo lugar, lo que seguro que en mi vida de cotización y consumo nunca veré; era una especie de hotel para transeúntes, lo que hizo a más de unx pensar sobre el hacerse transeúnte de profesión. Habitaciones individuales con baño privado, lo más cómodo e higiénico que había visto hacía mucho tiempo. Con vasito de leche antes de irte a la cama e interrogatorio vitae para sentirte como en casa.

Pero siguieron las dificultades: el desviador trasero de Javi a punto de explotar, cuando llegan las amenazas de lluvia, y camino de Solana del Pino, que hemos de atravesar con límite horario, a 700… 700.000 devotos enlatados y con sus respectivas familias religiosas beatamente borrachas. Solución: cambio de rumbo.Con la vista de los últimos linces, huyendo de misa, pasamos Sierra Morena por las selvas de Cardeña. En dos tiempos cruzamos Sierra Madrona y salimos de Jaén. El primer grupo “atraca”, bici en mano, a la asistente social de Fuencaliente, consiguiendo incluso bocatas veganos y alguna birra. El grupo rezagado y contrarreloj, sale medio ebrio de Andújar huyendo de las batallas sordas siempre ganadas de Baltasar.

Conseguimos pasar lo peor, en cuanto a relieve se refiere, sin mucha dificultad física y empezamos a sentir que estamos más que fuertes. ¿Será el dopaje de tigretón y leche condensada del cual nos valemos?Lo cierto, es que evadimos la lluvia, y conseguimos encontrar poco a poco un ritmo común que hace que vayamos todxs juntxs; y que tras un potente desayuno hayamos hecho que gracias a nuestro gasto se despidiera a la asistente de Fuencaliente. ¿Dónde vamos arrasamos? No, eso pasa por privatizar los recursos naturales como las termas o por no montar en bici, por no entrar en la vida sexual de la concejala.

Lo que mal llaman Castilla La Mancha, es de pronto un valle de dehesas como el de Alcudia, que nos sorprende por su verdor, y de tarde el relieve que se dibuja en plano, ofreciendo multitud de colores al atardecer, como sólo es posible en el Campo de Calatrava. Acabamos aquella deportiva jornada, como no podía ser de otra manera, en los vestuarios de Alcolea, brindando con los vinos que sobornan los de este fantasma pueblo a los pobres árbitros incorruptos.

Estamos más allá de la mitad del trayecto y nos sentimos muy fuertes, tanto que no nos frenan ni el cambio de Javi, ni que el grupo se deshaga en Cabañeros. Al grupo no lo detiene ni el ingeniero de El Molinillo, y cuando las jaras comienzan a florecer, decidimos celebrarlo a nuestra aventurera forma. Con una gran cena con cocidito, con pasta con manzana, y un tecito, en torno a un gran fuego, y en plena hermandad en medio de los Montes de Toledo. Que bestia. Se habla de que al día siguiente se está en Leganés. ¿Será verdad?

De madrugada pasamos más frío que en la guerra, menos lxs que llevan el equipo oficial de Olazábal. Desayuno sin estimulantes, Sara que se encuentra un poco mal, los de las bicis de juguete tienen que cruzar un río, enfrente está el puerto del Milagro, y nadie sabe donde está Elisa. ¿Y quieren que lleguemos a Leganés?, ¿Será posible cruzar toda la provincia de los bolos, los que peor conducen de Europa toda, y llegar a las mismas puertas de Madrid?Alexis siempre entusiasmado como si algún dopaje le poseyera dice que sí, Jorge a piñón fijo como casi todo el viaje lo reitera, el platazo lo pone Leire con su tanquebici con forma de camello, Robert con su sonrisa psicotrópica pedaleando mil veces por segundo que tira, y el resto seducidos y con canciones versionadas hacemos posible el Milagro. Los Montes de Toledo son poco a nuestras ruedas, el páramo hasta Toledo es una pista de despegue donde volamos, Toledo nos provee de toda la droga necesaria para hacer lo imposible. Nos faltaron pueblos y montañas, nos faltaron provincias enteras por recorrer el día en que el grupo pedaleaba psíquicamente embriagado por la llegada. Y de noche, por las grandes avenidas y entre los inmensos polígonos, llegamos al hogar siempre abierto que nos brinda la gran familia de la Gotera. Gracias a todxs.

Recordamos todo esto y muchísimo más, protegidxs entre 3.000 bicis, sembrando el caos a la estúpida e impotente circulación contaminante y sistemática, redescubriendo Madrid con nuestras voces de rebeldía. Descubrimos orgullosxs entre la alegría que reporta el pedalear, esas preciosas balas que disparan diariamente al sistema mecánico del dinero, del petróleo asesino y de las putas prisas. Que bonitas que son, y que gran familia han creado. Que fuertes están las bicis dilariánas, que fuerte la txirrindula, la que vino desde Málaga, la que se fue a Salamanca y la Numantina. Gracias a ellas y al único grupo de críticxs que oso realmente ensanchar los caminos de la Península para viajar, no para trasladarse; para luchar, no sólo para divertirse. Aupa por ellas. Suerte.

Salud y pedal.

¡¡VAYA BICI BONITA!!

Pongamos un poco de color a este blog, con un atardecer con bici desde el parque de la Cornisa en Madrid. De esta puesta de sol tenemos foto, las demás las disfrutamos durante el viaje. Pilla tu bici y salte de la urbe para verlo!!

viernes, 22 de mayo de 2009

HOMENAJE A MARIANA PINEDA

"La Plataforma Granada Abierta organiza homenaje a Mariana Pineda. Reivindicamos al Ayuntamiento de Granada que pase la festividad local del 2 de enero, Día de la Toma, que divide a los granadinos, al 26 de mayo, Día de Mariana (símbolo de libertad) que nos une a todos.

Martes, 26 de mayo a las 20,30 horas en la Plaza de Mariana Pineda

Lectura de Manifiesto.
El trovador Javier Tárraga interpretará el romance de Mariana Pineda.
Cierre musical del cantautor Juan Trova.

Tenemos que llenar la plaza.Te esperamos y pedimos la máxima difusión de este acto en tu entorno." (mensaje original)

¡Vente con tu bici! Ciclistas por la tolerancia y libertad!!!

lunes, 18 de mayo de 2009

NO AL BICIBORREGUISMO

8 bicis, 6 días, mapas, aventurillas varias, 500km pedal a pedal y A PIÑÓN llegamos a Madrid. Todos los días del viaje fuimos cargandonos de energía, dispuestos a quemar la ciudad tras crear una masa consistente tras la unión de ruedas que circulan por las calles (¡el carril bici es aparheid!) y no expulsan malos humos petrolíferos; ya fuese por itinerarios fijados o bicicriticas improvisadas de idas y venidas al barrio donde pasamos la mayor parte de los dias, encontrándonos como en casa, ese barrio que, poco a poco, va tomando otro tono tras la liberación de edificios y solares. Estrecho. Donde las bicis pueden ser arregladas en Anastasio y su taller bici.

A pesar de ser una ciudad hostil a las bicis, no desistimos, no habíamos venido desde tan lejos para dejar de lado nuestra filosofía y allí donde íbamos era a pedales. Mucha paciencia con los coches, motos y demás fauna urbana (incluidos peatones).

En los días de la Criticona pudimos darnos cuenta que las distintas masas criticas que se realizaron fueron una especie de felizpaseo, en los que nos divertimos mucho, pero se dejó de lado una gran oportunidad de corte de laM30, que se hubiese podido realizar por la masiva concentración de bicicletas. en muchas ocasiones nos dimos cuenta de que la gente que organizaba todo esto querían una extraña armonía bicis-coches, que sorprendia bastante en estas jornadas. Una de las mejores cosas fue la tarde de Alley Cat, una carrera (en origen de mensajeros con bicicletas a piñón fijo) con una serie de acciones contra los "jinetes del apocalipsis" que están acabando con el mundo.

Muchos tipos de gente, muchas reivindicaciones, todxs sobre bicicletas distintas (2pisos, de montaña, de pasea, piñón fijo, tandem, triciclos..), cada unx con sus historias, haciendo una masa critica.

Todo esto demostrando que la bicicleta como medio válido de transporte, autonomía, independencia, antisistema... de lucha, en definitiva.
Todo el mundo a pedalear!!